miércoles, 30 de mayo de 2012

Ma Liberté



Mi libertad, ¿quién encerró mi libertad?.
Mi libertad, arrodillada suplica la libertad.
Mi libertad, es libre de elegir su cárcel.
Mi libertad, desea abandonar los muros, la ciudad...

Mi libertad, mi dueña, mi esclava y mi enemiga.
Mi libertad, las venas y el suicida.
Mi libertad es el lienzo, es mi libertad el óleo.
Mi libertad es lo que yo más amo y tanto odio.

Soy la llave que libera sus grilletes,
mas soy yo esos grilletes y su preso también.
Soy el arco que conmueve el alma de su violín.
Una parte de mí muere y es su principio,
y sin embargo si ella muere, sería mi fín.

Tiemblan sus manos, va tiritando cada eslabón
repicando un slalom sobre la gran muralla.
En ella hay dos heliotropos girando hacia y a mi corazón,
quien bombea libertad a mis pies para que me vaya.
Y es que a mi libertad no puedo decirle no.




Autor: Miguel Hernández Pindado.
                                                             

                                                               

viernes, 4 de mayo de 2012

Tango Mortale




Orden, como desde arriba: el cuerpo que huye el cuerpo,
estirado, está en fuga,
así es como esto nos arrebata.

Ningún abismo, pero una vastedad a la que,
como si hubiera espejos alrededor,
lanzamos miradas que se pierden.

Y luego, ordenado: volver hacia dentro.
Nos movemos en el sitio, en lo más interior del sitio
y seguimos el compás.

Caídas contadas, las casi-caídas,
los pasos que siguen, vacilan, retrasan,
arrastran, posponen el fin.

¡No muere, no muere! Este yo de dos,
en tanto que el tango, el tango mortale
siga una forma de paso.

Con lo que queda de aliento en la fiesta sin nadie.
Los dos se celebran, y al final, no obstante,
esperan aplausos.

El dolor es sólo máscara. En disfraz nos deslizamos
en pista sin límite, pisándole a la muerte los talones
y a nosotros también.



Versión de Eustaquio Barjau


                                                Autor: Günter Grass